Si bien existe una gran variedad de refacciones mecánicas para el mantenimiento correctivo y preventivo de los autos, existe también infinidad de catálogos para el cuidado de la carrocería, y en general el mantenimiento del aspecto en general de los autos.

La mayoría de las partes metálicas de un auto están protegidas con diferentes productos y técnicas anticorrosivas desde la fábrica; así también ofrecen una protección estructural, térmica y acústica. Sin embargo, la corrosión es el peor enemigo de cualquier producto de acero, y los productos aplicados inevitablemente sufren de cierto desgaste debido a diferentes elementos:

La oxidación: Es la reacción del oxígeno con el acero que produce óxido de hierro.

El agua (humedad): El agua es un elemento que genera oxidación, y la humedad constante es aún peor ya que se penetra en todas las fisuras.

Gravilla: Los autos mientras avanzan levantan de manera natural una cierta cantidad de gravilla que afecta su parte inferior, lo cual también desgasta la protección anticorrosiva.

Barro: Cuando el barro se acumula en las partes metálicas, se extiende la humedad más fácilmente

Sal: El cloruro de sodio se pega en las partes metálicas, sobre todo en las zonas costeras

Existe una gran variedad de productos anticorrosivos que ayudan a aminorar los daños que hacen cada uno de los elementos mencionados anteriormente:

  • Selladores
  • Imprimaciones
  • Protectores de bajos y antigravilla
  • Ceras de cavidades